La Ley de Vivienda: Las decepciones y el futuro que nos jugamos.
Hemos dado por hecho que esta ley nació muerta. Primero, porque hay demasiadas ganas de hacerlo; segundo, y es aquí donde queremos convenceos, porque los asuntos más apremiantes, los más urgentes, van a quedar en el limbo de la inacción -mala leche dicho en plata- de los Gobiernos conservadores que nos han traído las recientes elecciones locales y autonómicas.
Vamos a tener que gestionar mucha frustración. No podéis imaginar el trabajo y la ilusión que pusimos estos meses, para nada. Y por eso entendemos la vuestra.
En Madrid, aunque la Ley lo permite, nadie va a regular los precios de los alquileres. Y muchos intentarán aplicar subidas abusivas (ya está sucediendo: https://www.elsaltodiario.com/vivienda/140-inquilinos-vencen-gran-tenedor-negaba-cumplir-tope-2-ciento).Tendremos que pelear, organizarnos, como ya se está haciendo, por ejemplo, desde el sindicato de inquilinas: https://twitter.com/InquilinatoMad.
Pero la Ley de Vivienda es una herramienta que, a medio plazo, puede darnos precisamente lo que más necesitamos: un parque de vivienda pública destinada al alquiler. En los nuevos desarrollos, hasta ahora, por ley un 30% estaba destinado a Vivienda Protegida, que en tu totalidad se dedicaba a la venta. Ahora, ese 30 sube al 40%, y la mitad, debe destinarse al alquiler social. Estamos sentando las bases para que, a medio-largo plazo, tengamos finalmente casas de alquiler asequibles garantizadas por el Estado. Gobierne quien gobierne en la Comunidad de Madrid o en el Ayuntamiento. Lo creáis o no, hay tiempo para que operaciones como Madrid Nuevo Norte se reconvierta y haya casas de alquiler social muy cerca de nuestro Tetuán. Por no hablar de la Operación Campamento o los PAUs que se están proyectando en el sureste (de los que son víctimas las personas que viven en la Cañada Real).
Las próximas Generales son vitales para consolidar, como mínimo, esos avances. Incluso para mejorarlos. Imaginad que los 35 diputados de Unidas Podemos, son 60 de Sumar. Imaginad que son 95, y que Yolanda Díaz puede optar a la Presidencia del Gobierno. A pesar de la hostilidad nada disimulada que un Gobierno así va a encontrarse, estaríamos en condiciones de consolidar las bases para un giro político en pocos años, si conseguimos recuperar los gobiernos de muchos Ayuntamientos y Comunidades Autónomas.
Por eso es importante lo que se está construyendo en Sumar, a pesar de todas las dificultades. Si a primeros de año afrontamos unas elecciones locales con una ilusión que no habíamos sentido en mucho tiempo, esta vez vamos a por todas. Magullados, pero con las ideas claras. Y contamos con todos vosotros porque no queremos fracasar. Nos lo merecemos, vosotros y nosotros.