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Macartismo de barrio del PP en Tetuán: rechazo al Orgullo LGTBI y censura ideológica

El Pleno de la Junta Municipal de Tetuán del pasado 18 de abril fue, por varias razones, un ejemplo más del cambio gradual que se está dando en nuestro país y en nuestra ciudad en particular, impulsada por la ciudadanía junto a las fuerzas del cambio. Hay un nuevo país que estamos construyendo de forma participativa, un país democrático de derechos sociales y respetuoso con nuestra diversidad cultural, nacional y sexual, y hay un régimen que niega derechos, instalado en la cultura de la corrupción y la represión, que se resiste a perder el protagonismo en la vida pública.

Muestra del nuevo tiempo que estamos viviendo es, por ejemplo, que en el pasado Pleno se aprobaron ya las primeras tres propuestas provenientes del Foro Local de Tetuán, propuestas redactadas por vecinas y vecinos del Distrito de forma participativa sin tener que canalizarlas a través de los diferentes grupos políticos. Las propuestas las defendió en el Pleno el Vicepresidente del Foro Local de Tetuán, Luis Arribas. Estas propuestas eran, por parte de la Mesa de Cultura, un Local de ensayo para los músicos de Tetuán y otra relativa a una Escuela de artes escénicas orientadas a la infancia, y por parte de la Mesa de Igualdad y Contra la Violencia de Género, una propuesta relativa al Regreso a Tetuán de la Biblioteca de Mujeres. Todas ellas fueron aprobadas por unanimidad.

Sin embargo, el PP protagonizó los hechos más representativos del régimen casposo que está instalado todavía en nuestro país. El PP fue el único grupo que no apoyó la propuesta de celebrar unas jornadas LGTBI en Tetuán, previas al Día Mundial del Orgullo que tendrá Madrid como epicentro. Todos los demás grupos apoyaron dicha propuesta, que incluye diferentes iniciativas culturales como un ciclo de cine y charlas. A pesar de los intentos del PP de que olvidemos su vergonzosa oposición durante años al reconocimiento de derechos LGTBI como el Matrimonio Gay, que recurrió ante el Tribunal Constitucional, es evidente la total sintonía que mantienen con sectores ultraconservadores de nuestro país anclados en un pensamiento sectario, homófobo y excluyente.
Si por algo destacó la línea política del PP de Tetuán en el pasado pleno fue por una suerte de «macartismo de barrio», al presentar una propuesta donde calificaba como «propaganda» el ciclo de cine ruso que se organizó en Tetuán los pasados meses de febrero y marzo, con motivo del 100 aniversario de la Revolución rusa, donde se proyectaron las películas ‘El acorazado Potemkin’ (Sergei M. Eisenstein), ‘Octubre’ (Eisenstein), ‘La Madre’ (Vsévolod Pudovkin), ‘Lo viejo, lo nuevo’ (Sergei M. Eisenstein y Grigori Aleksandrov) y ‘El hombre de la cámara’ (Dziga Vertov). Tal y como señaló el portavoz de Ahora Madrid, todas ellas son consideradas obras maestras de la historia del cine, reconocidas por la crítica, que han tenido multitud de homenajes, documentales y por diferentes instituciones nada sospechosas de «bolcheviques» como el Britisth Film Institute. La propuesta del PP fue rechazada, desde Ahora Madrid se la calificó como de «odio ideológico», «inquisitorial» y propia de «Torquemada», cuya intención era censurar y «decidir qué se puede y qué no se puede ver» en nuestro Distrito.

Frente a las fuerzas de la intolerancia y los recortes sociales, cuyo máximo exponente es el PP, cada vez más se abre paso un país que llega a acuerdos para defender la libertad sexual, la pluralidad ideológica, la cultura y la participación democrática de la ciudadanía en Política.

En el Pleno se aprobaron propuestas como la que presentó la Asociación Vecinal Ventilla-Almenara, para la instalación de un ascensor en la salida del Metro Ventilla (línea 9), para dar acceso al vecindario del barrio con movilidad reducida, una reivindicación que va también en la línea que siempre hemos defendido desde IU Tetuán. Otras propuestas aprobadas fueron el mantenimiento de bibliotecas y salas de lectura y un mantenimiento más adecuado del jardín Carlos París.

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